Javier Blake: Un momento donde replicamos cicatrices

octubre 22, 2023

Un ambiente demasiado emocional.

Javier Blake nos transmitió más de lo que esperaba, sin duda se escucho como una noche difícil para el y para muchos de nosotrxs los que fuimos al Teatro Metropólitan.

Creo que en este medio les he contado mucho sobre como nos han servido los conciertos para nuestras catarsis personales, es normal que hagamos eso durante los shows, pero olvidamos que incluso los propios artistas lo hacen en el escenario.

Empezamos fuertes…

Empieza a sonar Bomba Atómica, la verdad yo llevaba toda la semana escuchando esa en bucle, debo decir que incluso días antes lloré con esa canción así que tenía ciertas expectativas para cuando la escuchara en vivo, pero la emoción del show hizo que me enfocara en ver como Javier la interpretaba, mis pensamientos pasaron a segundo plano, solo estaba disfrutando mientras le tomaba a mi chelita y cantaba «hubiera sido mejor que acabara en una bomba atómica».

Mientras pasaba canción tras canción, Javier nos iba contando brevemente un poco de cada una, pasó Rompeolas, Estúpido Adiós, donde nos hizo alusión a las segundas oportunidades; Talismán donde el escenario se iluminaba de colores tal cual el resplandor de un talismán.

Una voz entrecortada y adormilada nos decía que la siguiente canción era para dedicar a nuestros padres, pues muchas veces no entendemos la razón por la cual se portaban de cierto modo con nosotros y eso nos pudo afectar, pero el (Javier) al ahora estar en ese lugar, entiende totalmente lo difícil que es tratar de estar bien para otra persona cuando por dentro tu ni siquiera sabes como estar bien para ti mismo. Y así sonó Cosas De Grandes.

Girasol y No Hay Sistema Que Nos Rija sonaron antes de llegar a las siguientes que nos hicieron comprar mas chela. Cicatrices sonó, no hay mucho que decir cuando cantas «juegas con fuego, no te importa a quien quemar». Seguido de Dice Que Se Va El Próximo Mes y de Romeo. Este combo de canciones sin duda hacen que la herida que ya tenias cicatrizada te vuelva a supurar, mas cuando quien la canta se nota medio apagadillo, entonces haces esta conexión empática de «chale dude, te entiendo».

Siguiendo con Cuenta Hasta Diez y la colaboración de Kill Aniston (quien había sido el acto abridor) ya nos estaban dando la idea de que el show estaba por terminar, solo quedó escuchar No Me Provoques y Réplica. Como les había dicho en otra nota, esta historia de hartazgo pero con la ¿esperanza o amenaza? de que exista una Réplica, nos deja este concierto como con una leyenda de «continuara…» y así esperemos que sea para la carrera de Javier Blake, réplica de éxitos como llenar totalmente un Teatro Metropólitan.